Los barcos salen cada 45 minutos y transportan coches, camiones, autobuses..., la ida es gratis, sólo hay que pagar a la vuelta (20,35 euros por el coche y dos personas).
El ferry sale a las 10:30 horas y el trayecto es corto y ameno, ya que enseguida se pasa por la Isla de Comino y no paramos de fotografiar las impresionantes cuevas que hay en sus acantilados.
En algo más de 30 minutos estamos en la Isla de Gozo.
La primera parada que hacemos para tomar un café es en la población de Kewkija y donde encontramos la preciosa iglesia de San Juan Bautista.
Después de la breve parada ponemos rumbo hacia la capital de la isla, Victoria, donde tenemos el hotel para esta noche. Después de hacer el checking y dejar el coche bien aparcado, nos vamos hacia el centro caminando para visitar la Ciudadela.
Pasamos por varias plazas llenas de gente y buen ambiente como la Plaza de la Independencia.
La Ciudadela medieval es pequeña, pero es el principal atractivo de Victoria. Nos recibe con una impresionante muralla y ya dentro, la bonita Catedral de la Asunción.
La entrada a la catedral cuesta 3,5 euros y da derecho a una visita del museo catedralicio, pero no entramos.
El tiempo lo dedicamos a recorrer las murallas desde donde se tienen unas bonitas vistas de Gozo y de la propia catedral.
La parte norte de la Ciudadela está prácticamente vacía y en ruinas, bajamos de la muralla para callejear un poco hasta regresar a la Catedral y dar por concluida la visita.
Regresamos a las calles de Victoria para hacer la visita a la Basílica de St. George's, y salimos encantados de su interior.
Buscamos un restaurante para comer y luego regresamos a por el coche para hacer los pocos kilómetros que nos separan del Santuario de Ta'Pinu.
En la gran explanada del santuario se pueden ver mosaicos preciosos sobre pasajes de la vida de Jesucristo.
Desde aquí sale un camino que termina en una colina donde se puede ver un gran Cristo y por donde los fieles van rezando un rosario y parando en las distintas estaciones.
Nuestro siguiente destino es la zona de Dwejra, en el noroeste de la isla donde encontramos un verdadero museo de historia, arqueología y geología al aire libre.
Hasta la Bahía de Dwejra se acercaban todos los turistas para fotografiar su espectacular Ventana Azul, un espectacular arco de piedra caliza que sirvió de telón de fondo en películas y series ( Juego de Tronos), pero que nosotros ya no pudimos ver porque por su mal estado de conservación, un fuerte oleaje se encargó de su derrumbe en marzo de 2017.
En la Bahía vemos la Isla de Fungus Rock, un gran islote situado en la entrada de una laguna.
También es conocida la zona por los submarinistas, ya que acuden para explorar las grandes cuevas excavadas en el acantilado.
Imaginamos que en zona estival este trozo de costa se pondrá hasta arriba de gente aprovechando estas maravillas de la naturaleza.
Para finalizar el día, nos desplazamos hasta Marsalforn, un destino costero al que llegamos para visitar las Salinas de Qbajjar, con más de 350 años de antigüedad y excavadas en la roca.
La experiencia de caminar por el borde de las salinas con el brutal sonido de las olas golpeando el acantilado es algo que no olvidaré, llegué a pasar miedo, pero la visita nos encantó.
Ya oscureciendo regresamos hasta Victoria para ir al hotel a descansar un rato antes de salir a pasear por las callejuelas iluminadas y buscar un restaurante donde cenar.
Terminamos cenando en el mismo sitio donde comimos, y por suerte una de las camareras que hablaba un perfecto castellano nos invitó a visitar mañana la Cueva de Calipso, y tomando nota nos despedimos de ella y nos vamos a dormir.